ATLÉTICO 0 - RACING 0
Atlético
De Gea; Ujfalusi, Perea, Godín, Filipe Luis; Raúl García (Koke, m. 68),
Assunção, Tiago (Valera, m. 21), Fran Mérida; Diego Costa y Agüero.
No utilizados: Joel; Domínguez, Antonio López, Mario Suárez y Borja.
Racing
Toño; Pinillos, Henrique, Torrejón, Cisma; Kennedy (Iván Bolado, m. 74),
Diop, Colsa, Adrián; Munitis (Serrano, m. 88) y Rosenberg (Lacen, m. 83).
No utilizados: Mario; Francis, Christian y Nahuelpan.
Árbitro
Turienzo Álvarez. Amonestó a Colsa, Perea y Raúl García.
Unos 30.000 espectadores en el Vicente Calderón.
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Empate sin goles con el Racing
El Atlético de Madrid, desarmado y sin respuesta
El Atlético de Madrid salvó un punto en la visita del Racing de Santander al Vicente Calderón.
Poco más pudo reclamar a la vista del juego ofrecido contra el conjunto santanderino en el
primer partido de 2011. Las bajas de Forlán y Reyes, así como la marcha de Simao, hicieron
mella en el ataque rojiblanco, donde el Kun echó en falta balones y algo más de colaboración
por parte de sus compañeros. No ayudó la lesión de Tiago y la entrada de Valera,
pero aún con todo Diego Costa pudo lograr el triunfo en el último
remate del partido después de que De Gea salvara los muebles.
Que iba a ser una tarde-noche de fútbol difícil en la ribera del Manzanares podía intuirse al ver
una alineación en la que Raúl García salía desde la banda derecha por falta de mejores
alternativas. A excepción de una primera ocasión de Agüero, el choque empezó trabado desde
el inicio. El panorama empeoró con la lesión de Tiago, que se resintió de la parte posterior de la
pierna derecha en un sobreesfuerzo y tenía que ser sustituido por Valera. El murciano entró
como interior derecho y desplazó a Raúl García al centro, pero los problemas
siguieron intactos. Al Atlético, sin bandas y sin creatividad en la
medular, le costaba superar el centro del campo racinguista.
Desaprovechó la oportunidad Fran Mérida, que sin Simao está obligado a dar un paso al frente
y poner en duda la llegada de un refuerzo invernal. No fue buen abogado para su causa, y
apenas se dejó ver en un par de arrancadas en las que le falló lo más importante: tomar la
última decisión. Como el resto del equipo, tardó demasiado en pensar. Filipe no aportó más
llegada y, en una situación que puede resultar significativa, Ujfalusi fue quien más peligro tuvo
con sus incorporaciones al ataque. Mientras tanto el Racing resistía bien colocado en defensa.
Aunque con Raúl García se esperaba tener más incorporaciones desde el centro del campo,
la mejor corrió a cargo de Diego Godín, hoy titular en sustitución de Domínguez. El uruguayo
salió de la cueva para recuperar en el círculo central, avanzó hasta la frontal y cedió sobre la
entrada de Agüero, pero cuando el argentino quiso sacar el centro se vio tapado por la defensa
racinguista. Aunque los de Sánchez Flores contaban más con el balón, las ocasiones eran
escasas y la mejor acabó correspondiendo al Racing, que pudo encontrar el gol poco antes
del descanso gracias a una falta botada por Kennedy que despejó De Gea.
El susto pareció animar al cuadro montañés, que en la reanudación gozó de sus mejores minutos
de juego. Incluso llegó a marcar por mediación de Adrián González, pero su gol fue anulado por
fuera de juego. Los atléticos tardaron un cuarto de hora en aparecer sobre el verde del Calderón,
aunque sin un plan de juego claro. La iniciativa era suya, pero no las intenciones. Para entonces
el Kun ya había decidido prescindir de compañeros para intentar sacar el
partido adelante. Y casi tuvo más éxito que contando con ellos.
No pudo sin embargo batir a Toño, que cuajó una sólida actuación para poner el broche a la buena
actuación defensiva de su equipo. Alentado por un Atlético inofensivo, el Racing se vino arriba y
pudo haberse llevado los tres puntos. Los tuvo en sus botas Rosenberg, que aprovechó un error
gravísimo de Perea para tentar a De Gea, pero el portero salvó la situación con nota y evitó el gol.
Al final dio la impresión de que los rojiblancos tenían el balón en ataque más por tenerlo lejos de
su portería que por intentar llevarlo a la contraria. Y a pesar de todo, tuvieron la última oportunidad.
En la última jugada del partido, Fran Mérida puso un centro en la cabeza de
Diego Costa y el remate del brasileño, picado y buscando el palo,
se encontró con la estirada de Toño para salvar el empate.
Al final, reparto de puntos y sin goles, resultado acorde
a los méritos hechos por uno y otro equipo.
A. Aragón | Madrid 04/01/2011
elmundo.es
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