ATLÉTICO, 4 - UDINESE, 0
Atlético
Courtois; Perea, Godín, Domínguez, Antonio López; Gabi,
Mario, Diego (Koke, m. 70), Arda Turan; Adrián
(Salvio, m. 77) y Falcao (Pizzi, m. 82).
Udinese
Handanovic; Ekstrand, Danilo, Domizzi (Basta, m. 71);
Pereyra, Badu, Doubai, Battochio, Neuton; Fabbrini
(Abdi, m. 23); y Floro Flores (Isla, m. 86).
Goles
1-0, m. 7: Adrián deja atrás a dos rivales y
bate por raso a Handanovic.
2-0, m. 12: Adrián, de cabeza tras un
centro medido de Antonio López.
3-0, m. 37: Diego culmina una jugada maravillosa.
4-0, m. 67: Falcao, de jugada individual.
Árbitro
Istvan Vad (Hungría). Amonestó al local Mario (m. 52).
15.000 espectadores en el Vicente Calderón.
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Adrián fortalece a Manzano
Su majestad el gol entró al Calderón con las lluvias y Adrián. El asturiano despejó
el panorama del Atlético de Madrid en la Europa League. Se convirtió en el
caudillo que acribilló al Udinese antes del descanso: primero con el pie, después
con la cabeza y más tarde con la generosidad que permitió anotar a Diego tras
una jugada sencilla y perfecta. Después, Falcao sumó un gol individualista y
magnífico. Los rojiblancos lideran el Grupo I y le ganan el coeficiente
goleador a los blanquinegros del norte de Italia.
Manzano no se va. Manzano se queda. Los que le cantaron el despido forzoso
fueron quienes no asomaron por un estadio Vicente Calderón con las sillas de
grada relucientes y sin peña. Se fueron, aunque volverán. El entrenador se
quedará mientras sus errores no se noten y, sobre todo, si los rectifica. Visto lo
que ha ocurrido en apenas cinco días sobre el terreno de juego,
canta el fallo en que incurrió el técnico de Bailén.
Y el acierto es rectificar con Adrián, que le sacó las castañas del fuego en la
previa europea contra el Guimaraes (dos goles y dos asistencias en dos
partidos) y perdió importancia con la llegada de Falcao y su primer partido de
Liga, bajo cero contra Osasuna. Ha tenido que reñir el técnico con José Antonio
Reyes para saber que el delantero de 23 años le ofrece lo que al
Atlético le faltaba: alegría, velocidad, movilidad, profundidad.
Adrián no es un futbolista consagrado en estos momentos. Llevó al Atlético un
sambenito de haber marcado sólo ocho goles ligueros en un Depor camino de
Segunda y cuatro en la Copa. En el Atlético, tras la segunda exhibición entre
domingo y jueves, ya suma seis. Pero lo trascendente es que está en
permanente ofrecimiento. Con él, son mejores Diego o Arda,
porque tienen una referencia más cercana que la de Falcao.
El Udinese, que vino a defenderse con un once muy joven, se vio desbordado
por un Atlético que sólo cambió a los laterales respecto a la goleada al Zaragoza.
El equipo de Guidolin, segundo del calcio, siguió tan tieso de fútbol como en
Udine, pero se encontró a un rival reforzado que resolvió muy pronto, porque a
Adrián le llegaron dos balones entre los minuto 7 y 12 y
los envió a la red de Handanovic sin pestañear.
Arda le sirvió el balón al área en el primero y Adrián, con un quiebro, tumbó al
defensor, Ekstrand, antes de buscar el ángulo preciso para que su derecha
dirigiera la pelota al lugar indicado. El segundo mostró su disposición al remate
de cabeza tras un centro perfecto desde la banda de Antonio López.
El Udinese se diluía, se resbalaba en el Calderón -escurridizo césped, que ya
probó el Zaragoza- y patinaba con todo el equipo. Llegó una jugada excepcional,
que comenzó en Adrián y terminó en el gol de Diego después de
preciosas combinaciones, incluido un taconazo del
Tigre Falcao. Al museo nacional con ese vídeo.
Sólo en los minutos finales, tras la guinda individual del 9 colombiano del Atlético,
el Udinese se aproximó con peligro. Un tiro al larguero desde lejos y
varios disparos desviados apenas inquietaron a Thibaut Courtois.
Con Koke y Pizzi en lugar de Adrián y Falcao, el Atlético cerró
una noche fría en la que Adrián entonó el 'Manzano, quédate'.
F. Llamas | Madrid
03/11/2011 elmundo.es
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